STAP-Canarias y UGT-Canarias denuncian la nefasta gestión del concejal de Policía y Seguridad Ciudadana Jonathan Dominguez

El edil lagunero solamente se dedica al ‘postureo’ y a salir en redes sociales

EDDC.NET / Santa Cruz de Tenerife

La denuncia señala que “ha agotado dos tercios de su mandato al frente de esta área sin haber resuelto ni un solo de los asuntos pendientes traídos de atrás cuando su antecesor y ahora alcalde José Alberto en materia de personal y sindical como se habían comprometido”.

Además indican que “no sabemos si dicho concejal sabe que hay una Ley de Libertad Sindical y Estatuto Básico que indica de la necesidad de negociar los asuntos de su personal, pero por lo visto hay normas que según convengan o no mejor ni mirar, y así desde la gestión facilona se escaquea del mandato de sus otras responsabilidades con el personal bajo su responsabilidad”.

Le sugieren que, “de una vez por todas se ponga las pilas si realmente quiere reconducir el problema y la parálisis de la Policía Local Lagunera a la que ha conducido con su gestión, pues está muy bien que se preocupe tanto de su Twiter y lucimiento fotográfico en todo acto público, pero con eso no es suficiente para afrontar las necesidades de la Policía Local”.

Los dos sindicatos aseguran que, “de las dos únicas reuniones que ha mantenido con los sindicatos en años, de las cuales una ha sido con el alcalde por ausencia, y ninguna han servido para resolver nada de nada pues han quedado en palabrerío, ha ido perdiendo una gran oportunidad temporal para resolver esos muchos asuntos pendientes, así como afrontar la convocatoria de nuevos policías por la gran pérdida que se padece por jubilaciones, marcha de agentes y otras situaciones que hacen que tales carencias las supla con servicios extraordinarios de urgencia (al boleo), lo que supone parchear una situación que se le viene encima y que unido a otras situaciones internas y para salvar los apuros e incidencias del servicio tenga que recurrir a los favores y desigualdades que son la evidencia de un principio de decadencia y conflicto en la policía que de momento solo la salva la profesionalidad y esfuerzo de sus profesionales”.