Jaime Romero critica la dejadez de Pedro Quevedo a cuenta de los centros comerciales

Jaime Romero ha exigido al Tripartito del PSOE- Podemos y Nueva Canarias que “se coordine a la hora de tomar de decisiones, especialmente en asuntos que entrañan una importante relevancia al estar relacionados con el desarrollo económico y el empleo en nuestro municipio y como es la apertura dominical de las Zonas de Afluencia Turística, de la cual mientras el concejal de Promoción Económica, Pedro Quevedo va pregonando su intención de negar la apertura al centro comercial Las Arenas y la zona comercial abierta de Mesa y López en los domingos, el alcalde Hidalgo niega la mayor, afirmando que éstos continuarán abriendo a pesar de las intenciones de Quevedo”. Romero ha señalado que “la inexistencia de unos criterios claros y motivados del concejal de Promoción Económica  para determinar el cierre del CC Las Arenas y Mesa y López nos hace pensar que o bien este señor gestiona a golpe de improvisación, algo por otro parte habitual en este grupo de gobierno y como recordaremos hizo su compañero de gobierno Doreste con el CC Sotavento, Muelle Deportivo, el cual tuvo cerrado durante un mes, manteniendo a 30 empleados sin trabajo y sueldo, o lo hace siguiendo alguna manipuladora intención de la cual él solo conoce sus intenciones”. El edil popular recrimina a Quevedo que “éste vaya lanzando globos onda ante un tema tan serio que afecta a cientos de personas empleadas durante dichas aperturas dominicales en esos espacios comerciales y después, el alcalde afirme justo lo contrario y, todo ello, sin que ni tan siquiera se haya reunido con los responsables de estas zonas comerciales para analizar con datos y argumentos los beneficios y perjuicios que acarrearía una decisión al respecto en cualquier dirección”. Romero ha expresado su más firme apoyo a la apertura dominical de ambos espacios, ante los beneficios que aporta a nuestro tejido económico y la contribución al empleo en nuestra ciudad y ha añadido que una  vez en este punto “confiemos en que la carrera política de Quevedo, la cual lo está llevando a otros terrenos, Madrid, para ser más concretos, nos libere a todos de una de sus decisiones, tomadas a galope de avión entre Madrid y la ciudad, sin meditar, sin argumentos ni criterios serios y rigurosos que la avalen”.