Valido acusa a Defensa de dejar vigilancia de cuarteles en manos de una empresa pirata

La diputada de Podemos en el Congreso, Carmen Valido, ha instado a la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal –que visita estos días las instalaciones militares en cuatro islas canarias- a rescindir “de una vez por todas” el contrato con la empresa Marsegur, propiedad del empresario canario Miguel Ángel Ramírez, y encargada de la vigilancia de los acuartelamientos, un servicio que este gobierno ha externacionalizado y ya no realizan los propios militares. Marsegur tomó el relevo de Seguridad Integral Canaria –propiedad del mismo empresario- con una oferta todavía más baja que la anterior. Oferta que implica que los trabajadores de ésta cobren un 30% menos de sueldo, 726 euros mensuales, y 10 céntimos extra por la hora nocturna. Unas condiciones de precariedad que los sindicatos han denunciado en dos ocasiones, logrando ambas que la Justicia anule el convenio por no ajustarse al estatal. La última sentencia, más dura todavía que la primera, reprocha a Marsegur “su reincidencia y el contumaz incumplimiento de la legalidad”. En estas condiciones, Valido considera “intolerable y una muestra del falso patriotismo de este gobierno” que Marsegur continúe velando por la seguridad de unas instalaciones altamente sensibles, ya que se encuentran en un nivel 4 de alerta por amenaza terrorista. Los 96 trabajadores de Las Palmas y los 20 de Tenerife llevan además varios meses sin cobrar. “El gobierno, que eliminó la figura de baja ‘temeraria’ se escuda en su derecho a elegir la oferta más baja, pero nosotros entendemos que la Administración tiene otra responsabilidad, y a ésta no le importa la explotación laboral que haya detrás o el hecho de estar comprometiendo la seguridad de los militares por no garantizar unas condiciones dignas en la prestación del servicio”, acusa la diputada de la formación morada. Además, para Valido, es “insólito” que la administración siga contratando con un empresario que tiene múltiples causas en lo Social por incumplimiento de contrato, de pago, de las condiciones de trabajo. Valido recuerda por último que hay una tercera empresa propiedad del mismo empresario, Sinergia, que todavía paga menos que las dos anteriores, con la que sigue pirateando el mercado, porque las demás empresas no pueden competir con unas condiciones laborales dignas.