Un premio al pastoreo

(*) Antonio Morales Méndez

El Cabildo de Gran Canaria ha recibido el reconocimiento del programa Europarc-España al proyecto Gran Canaria Pastorea enmarcado en la estrategia de prevención de incendios forestales puesta en marcha por el gobierno de la isla. Este premio, en realidad, supone el reconocimiento al esfuerzo de muchísima gente que trabaja desde muy distintos ámbitos con la idea común de que una gestión eficiente del territorio, con una visión integral e integradora, nos permite hacer frente a las graves amenazas que se derivan del cambio climático. Amenazas como los incendios forestales, la erosión de nuestros suelos y la desertificación.

Durante décadas, las actuaciones destinadas a la lucha contra los incendios se han limitado a sofocar el fuego, con campañas que pretendían evitar la llama que da lugar a la devastación. El lema utilizado históricamente era  el de “Todos contra el fuego”, pero en realidad no existía una acción preventiva común. Más bien se fueron ampliando las consecuencias negativas del divorcio entre las administraciones públicas y las gentes del campo.

Sin embargo, este premio nos muestra que nuestro programa es un ejemplo de la lucha de todos y todas contra el fuego desde la prevención, la concienciación y la acción. Es por eso que Gran Canaria cuenta desde hace 9 años con un modelo en el que nadie sobra y toda la ciudadanía es necesaria para lograr la transformación económica, social y ecológica que dé respuesta global a esta emergencia climática. A este modelo de adaptación, a esta visión, le hemos dado el nombre de Ecoísla.

Y esa estrategia comienza a dar sus frutos. Una muestra de ello es el reconocimiento de hace escasos días con el Premio Experiencias Inspiradoras en Áreas Protegidas de Europarc-España, concedido al proyecto Gran Canaria Pastorea del Cabildo de Gran Canaria. Europarc-España es el principal foro profesional de las áreas protegidas en España, donde se discuten y elaboran propuestas para la mejora de los espacios naturales. Participa activamente en la Federación Europarc, organización que reúne a instituciones de 39 países europeos dedicadas a la gestión de áreas protegidas y a la defensa de la naturaleza.

Este prestigioso galardón tiene como objetivo identificar, reconocer y difundir proyectos e iniciativas inspiradoras que hayan abordado en su desarrollo tanto los retos de la dinámica rural como la adaptación al cambio climático en las áreas protegidas. Y esto es lo que, de manera pionera en Canarias, hace Gran Canaria Pastorea con el pago por servicios ambientales a los pastores que, con sus ganados, aprovechan, de manera coordinada con los servicios de Medio Ambiente y los Bomberos Forestales, las áreas estratégicas que pueden servir de cortafuego a los grandes incendios forestales.

Este es un aspecto que me parece de vital importancia, ya que estoy convencido de que el pago por servicios ambientales es una herramienta necesaria para la gestión del medio rural. Es también un reconocimiento a la tradición y al uso sostenible de la biomasa que producen nuestros montes.

El pastoreo contribuye a eliminar biomasa y previene la destrucción de miles de hectáreas, protege la vida y la biodiversidad y ahorra una fortuna a la ciudadanía, tanto en la prevención como en la restitución de los daños provocados por los incendios.

Por una cuestión de justicia y de eficiencia hay que reconocer que muchas de las actividades que se realizan en el medio rural tienen enormes beneficios para el conjunto de la isla, aunque el mercado no les asigne un valor. Es una cuestión, efectivamente, de justicia reconocerlo y de eficiencia integrar esas actividades en la gestión del medio.

La disminución en los últimos cincuenta años de la agricultura y de la ganadería, la sequía y las cada vez más preocupantes condiciones climáticas extremas, hacen que nuestros montes estén más expuestos a incendios forestales que, tal y como señalan los expertos, serán cada vez más graves y devastadores. Ante esta situación, el pastoreo conforma una excelente herramienta para gestionar grandes extensiones de terreno, ya que las cabras y las ovejas eliminan gran parte del exceso de vegetación que, cuando se seca, arde con facilidad.

El Cabildo, a través de su Consejería de Medio Ambiente, Clima, Energía y Conocimiento, establece así las ‘directrices de gestión del ganado extensivo mediante el pastoreo prescrito en ecosistemas insulares y territorios de elevada protección medioambiental’, lo que permite compatibilizar la prevención de los grandes incendios forestales con la conservación de la biodiversidad.

Son muchas las actuaciones que hemos de acometer para prepararnos ante los riesgos que se avecinan. Ya hemos creado el programa La Cumbre Vive, implantado el céntimo verde y estamos en el desarrollo de la primera experiencia en el mundo de llenar presas con agua desalada para producir energía y devolver a los montes - mediante redes, depósitos y embalses-  el agua que  ha ido perdiendo en las últimas décadas por la disminución del nivel freático, los trasvases a la costa sin control o la ausencia de lluvias.

Ya la isla dispone de la primera fábrica municipal de pellets en Artenara y hemos creado los programas formativos para contar con personal de prevención y extinción de incendios. El Instituto para la Gestión Integrada del Patrimonio Mundial y La Reserva de la Biosfera trabaja en la conservación y el desarrollo del mundo rural.

Pero, una de las iniciativas de la que nos sentimos más orgullosos es la que estrecha la colaboración del Cabildo con nuestro pueblo. Porque ‘Gran Canaria Pastorea' es un proyecto integrado en la estrategia ‘Gran Canaria Mosaico’ para fomentar la diversidad de paisajes, cuidarlos, ponerlos en producción y, sobre todo, para que sirvan como cortafuegos que frenen la propagación de los grandes incendios. Un paisaje múltiple que sirva de equilibrio entre la conservación de la biodiversidad y el sostenimiento de las actividades agrícolas, ganaderas y forestales.

Por eso, desde el Cabildo de Gran Canaria hacemos extensivo este reconocimiento a todas aquellas personas que han apoyado o participado en el proyecto, desde el comprometido equipo humano formado por los técnicos y técnicas del Cabildo, los hombres y mujeres del ámbito científico y la gestión,  y cuadrillas de Gesplan, hasta pastores y pastoras, asociaciones y profesionales que trabajan diariamente por la conservación de la naturaleza y que apoyan el medio rural grancanario.

Gracias a esta actuación del Cabildo, la ciencia, la técnica y el pastoreo tradicional conforman una extraordinaria herramienta para trabajar de manera conjunta por la conservación del patrimonio natural   y así lo ha reconocido el programa Europarc-España. Hemos de felicitarnos. Es un impulso para continuar en esta exitosa labor.

(*) Presidente del Cabildo de Gran Canaria