Se publica por segunda vez el manifiesto ‘Hay que parar la guerra’ con personalidades de 21 países
C. Tangana, Julia Otero, Luis Tosar, Vetusta Morla, Rafael Correa o Thomas Piketty son algunas de los 354 profesionales de 21 países distintos que han firmado el manifiesto de apoyo
EDDC.NET / Madrid
El manifiesto se publicó por primera vez el 29 de octubre en el periódico El País, promovido por Recortes Cero, y vuelve a publicarse en el mismo periódico como publicidad financiada por aportaciones de sus firmantes. Desde las 1000 firmas iniciales, el manifiesto cuenta ya con 4125 firmas de España, 7 países europeos más (Francia, Italia, Gran Bretaña… pero también candidatos como Serbia), y 13 países iberoamericanos (Colombia, Argentina, Brasil, Puerto Rico, Bolivia…), entre las que hay algo más de 350 profesionales destacados a nivel internacional o en sus propios países, además del apoyo de 89 organizaciones.
El texto empieza asegurando que ‘las criminales acciones terroristas de Hamás merecen nuestra condena más enérgica, pero no pueden servir para justificar el genocidio que practica el Estado de Israel contra el pueblo palestino. Tanto vale una vida israelí como una palestina’.
Entre las nuevas firmas se encuentran Andreu Buenafuente, Antonio Maestre, Jordi Évole, Joaquín Estefanía y Jon Sistiaga, los músicos Ana Belén, Víctor Manuel, Carlos Tarque, Rosendo, Ramoncín, los miembros de Love of Lesbian, la banda Vetusta Morla, Marwán, Ismael Serrano o la cantautora Annie B Sweet.
También firman los actores Luis Tosar, Geraldine Chaplin, Loles León, Alberto Ammann, Hector Alterio, los directores Pedro Almodóvar e Isabel Coixet, directores de teatro como Mario Gas, o los economistas Julen Bollaín, Juan Francisco Martín Seco y Miren Etxezarreta, además de escritores como Clara Usón, Elvira Navarro, Luisgé Martín, Marcos Giralt, el editor Jorge Herralde o el poeta Antonio Gamoneda.
El manifiesto se ha convertido en una voz internacional en poco más de dos semanas, reuniendo a firmantes como el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, el economista Thomas Piketty o el escritor norteamericano, Frank Goldman. Las firmas pasan por Gran Bretaña, con la traductora, Margaret Jull Costa, reconocida como Oficial de la Orden del Imperio Británico, por Países Bajos, con John Vervaele, presidente de la Asociación Internacional de Derecho Penal, por Italia, con el periodista Roberto Savio, e incluso por Serbia, con Aleksandar Matković, del Instituto de Ciencias Económicas de Belgrado. “Y prácticamente acabamos de empezar a recoger apoyos europeos”, aseguran desde el equipo promotor, “teniendo en cuenta que nuestro objetivo es el Alto el Fuego como primer paso”.
El 2 de noviembre una delegación del manifiesto se reunió en Moncloa con el presidente del Gobierno, al que trasladaron su intención de extender el manifiesto a nivel internacional.
Las firmas iberoamericanas están representadas por los expresidentes de Ecuador y Honduras, Rafael Correa y Manuel Zelaya, marido de la actual presidenta, el presidente del Grupo de Puebla, Marcos Enríquez-Ominami, y una larga lista de personalidades de la cultura, como la directora y el actor argentinos Cristina Benegas y Víctor Laplace, o el músico colombiano Jorge Velosa.
Son especialmente destacadas la lista de representantes públicos, senadores, exministros, activistas y profesionales de muy distintos sectores, de hasta 13 países iberoamericanos, pero especialmente el de juristas defensores de los Derechos Humanos. Entre los firmantes se encuentran dos expresidentes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, juristas que han ocupado el cargo de presidente de la Corte Constitucional y de fiscal general de Ecuador, que han sido miembros de la Corte Suprema de Argentina, la fundadora de la Red de Constitucionalismo Crítico de América Latina, o la presidenta de la Asociación Americana de Juristas en Argentina.
En la rueda de prensa de mañana, promotores y firmantes explicarán los detalles y la respuesta que ha tenido el manifiesto, extendiéndose tan rápidamente a 21 países y presentarán los próximos pasos de un manifiesto que aseguran “recibe ya peticiones de contacto de los cinco continentes”.
El manifiesto afirma que ‘nuestro lugar está con la justa causa del pueblo palestino por “la libre determinación, incluido el derecho a un Estado palestino independiente” tal y como reconoce la ONU’ y concluye con dos tipos de peticiones. Una exigencia, ‘a Israel, que detenga los bombardeos de inmediato, cumpla el derecho internacional y habilite un corredor humanitario’ y a Hamás que detenga ‘sus ataques terroristas y la liberación incondicional de los rehenes’. Además propone el alto el fuego, la mediación de la ONU, un acuerdo basado en la existencia de los dos Estados, y la implementación de la proposición aprobada por el Congreso en el 2014, en la que se insta al “gobierno a reconocer a Palestina como Estado”.