La Plataforma por la Dignidad denunció en 2016 graves irregularidades en los centros de mayores de Tenerife

Recordaron que esta situación no era novedosa sino que se viene produciendo desde hace años habiendo sido denunciada por familiares y por algunos sindicatos

EDDC.NET / Santa Cruz de Tenerife

La Plataforma por la Dignidad solicitó en el año 2016 una reunión urgente con el entonces presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso y el resto de grupos de la Institución, para denunciar lo que estaba ocurriendo en la mayoría de centros de Mayores dependientes del cabildo.

Calificaron de escándalo horroroso las numerosas irregularidades graves en los centros de mayores dependientes, cuya gestión está derivada a empresas privadas en algunos casos y en otros depende directamente del Cabildo.

Recordaron que esta situación no era novedosa sino que se viene produciendo desde hace años habiendo sido denunciada por familiares y por algunos sindicatos, pero con poca efectividad ya que por parte del Cabildo no se había hecho nada para parar esta situación.

Comentaron uno de los numerosos casos, de una anciana en el conocido como Hospital militar, que permanecía en una silla de ruedas en mal estado, y cuyos familiares habían denunciado que sufría numerosas infecciones de orina y grandes hematomas...

La Plataforma denunciaba que no se cumplían las ratios de enfermeros y auxiliares por número de pacientes. Ello explicaba -en parte- el mal atendimiento a muchos ancianos.

En particular denunciaban que a muchos no los asean en las duchas, sino en seco, con productos como espumas a tal efecto, lo que explicaría las infecciones denunciadas.

Otra de las numerosas denuncias de los familiares era la falta de protocolos de movilidad de aquellos pacientes que no podían hacerlo por sí mismos. Ancianos que -si no es por los familiares- no los cambian de sitio... con las consecuencias que para su salud tenía.

Comunicado de la Plataforma por la Dignidad 

Este fue el comunicado hecho público en 2016 por esta plataforma y publicado por SB Noticias: “volvemos desde la Plataforma por la Dignidad a tratar públicamente un asunto que nos debería avergonzar a todos como sociedad, un asunto que nos descalifica como pueblo, por el simple hecho de que tengamos que llegar a este punto, obligados a denunciarlo por estas vías, después de que los familiares hayan intentado arreglarlo a su manera, hablando y reclamando educadamente ante las instituciones responsables, sin éxito. Se trata, como habrán podido comprobar por el título, de la situación lamentable en la que parecen vivir algunos ancianos en centros de mayores de Tenerife, lo cual nos lleva a temer que este trato sea generalizado.

“.- Todo empieza cuando a finales de mayo de este año contacta con nosotros una señora de mediana edad, para pedirnos ayuda y asesoramiento por lo que estaba padeciendo su madre en el Centro Sociosanitario Santa Cruz, centro del Cabildo con buena parte del servicio externalizado con una empresa externa, es ese que hay junta la Plaza Militar.

“Esta señora nos cuenta y prueba con fotos y documentos, que su madre sufrió un corte en una pierna cuando iban a ducharla, un corte feo por el que tuvieron que darle algunos puntos. Nos cuenta que puso una reclamación en el centro y lo único que encontró fue una carta de disculpas, menos es nada. Nos cuenta que a su madre no la bañaban en la forma y con la asiduidad debida, con agua y jabón, y sí muchas veces con una especie de baño en seco, con un producto que tienen allí. Nos cuenta que la alimentación deja mucho que desear, carne y pescado se ven poco, de calidad, y sí muchos  batidos de proteínas sustitutivos, tal vez más baratos. Y sí le dan muchos laxantes, para que vaya bien al baño. Claro que, si va mucho al baño y no puede ir sola, tendrán que ponerle pañales y cambiar al anciano con asiduidad, si no lo cambian y duchan como es debido, vienen las infecciones, las escaras y otros síntomas.

“Y esta señora nos cuenta que ha de pagar por servicios y medicinas que en teoría deberían estar incluidos en el contrato y ser cubiertos por el centro, pues el centro se queda siempre con el 75% de la pensión de la persona, cuando no con algo más. Nos cuenta y nos cuenta esta señora, nos dice que si ella no va, su anciana madre se puede quedar en la misma posición, en el mismo sitio, durante horas. Nos cuenta que hay muy pocos enfermeros por planta, muy pocos auxiliares, y así las cosas, es normal que no puedan cuidarlos a todos. Nos dice que cuando los ancianos chillan o reclaman ayuda, en ocasiones les cierran la puerta para no escucharlos.

“De lo que ella nos cuenta y de lo vamos sabiendo por otros pacientes, parece evidente que no se cumplen los ratios recomendados. Unos 3 auxiliares por planta, con unos 40 ancianos por cada planta, aproximadamente. Pocos enfermeros, y aún menos médicos, que deberían ser permanentes en caso de superar los 100 residentes.  

“Y así, acaba mostrándonos las imágenes de su madre feamente amoratada en el brazo, por una caída o por vaya usted a saber. Algo que se hizo en el centro pero allí nadie sabe cómo pudo ser. De nuevo ella reclama y la contestación del centro no aclara nada, salvo que la van a pasar a otra parte del centro con más cuidados.

“Al final, esta señora tiene que llevarse a su madre al Hospital, porque las infecciones de orina son muy graves y no remiten. A día de hoy, más de un mes después, la señora todavía sigue en ese Hospital intentando curarse.

“Alarmados por lo que vemos y escuchamos, contactamos con otras familias del mismo centro, que nos comentan situaciones similares, pero también nos refieren que tienen miedo a lo que les pueda pasar a su familiar, y no desean hablar o denunciarlo públicamente.

“Con todo esto, indagamos un poco a ver qué pasa con la empresa que lleva la gestión de este centro y de algunos más en Tenerife, y lo que comprobamos es que su economía está bien saneada, por lo que parece, arrojando beneficios millonarios año tras año.

“II.- Impresionados todavía por lo que nos habían contado, nos llega otro caso a la Plataforma. Se trata de una señora que tenía a sus padres ancianos en el Centro Sociosanitario del Norte, con sede en Icod de los Vinos, dependiente del Cabildo y gestionado en parte también por la misma empresa que el centro de Santa Cruz.

“Esta señora tuvo que sufrir cómo su padre, anciano, se caía por unas escaleras en ese centro y perdía la vida, sin que en el centro supieran justificar las causas del siniestro adecuadamente. El caso salió en los medios y se llevó a la justicia. Adjuntamos aquí un enlace donde se informa del suceso y de algunas cosas más igualmente graves.
http://web.eldia.es/tenerife/2014-06-04/7-Investigan-causas-muerte-anciano-Hospital-Norte.htm

“Al poco, la hija cambia a su madre de centro, desconfiando de cómo pudieran atender allí a su madre después de lo que le había pasado a su padre y habiéndolo además denunciado. Su madre va ingresada al Centro Sociosanitario Nuestra Señora de los Dolores, en Santa Cruz de Tenerife.

“A diferencia de los otros dos centros, este está gestionado directamente por el IASS, sin empresa externa. Aunque algunas de las situaciones que se dan aquí repiten realidades. Así sucede con las comidas, esta señora nos refiere, prueba y demuestra que su madre no tolera una serie de alimentos. Y tras no encontrar solución en el centro, decide llevarle la comida adecuada a su madre. Parece ser que en este centro tampoco hay dietista ni comidas adaptadas a las necesidades de cada anciano, y sirven salchichas con patatas fritas y huevos a su madre, o tostadas de pan blanco, y nuggets de pollo frito, y más salchichas salseadas para cenar, y su madre acaba vomitando. Sus reclamaciones no van a ningún lado, y su madre repite los cuadros de otros muchos ancianos, y también aparece con infecciones de orina y otros gérmenes, y una herida en un dedo del pie, y después de mucho reclamar al IASS por mejoras en las condiciones del trato a su madre, decide denunciar lo que le está pasando en la Oficina de Defensa de los Usuarios Sanitarios dependiente del gobierno de Canarias, con un amplio dossier. Para su sorpresa, pasadas unas semanas, ya en Junio, esta señora recibe una notificación del juzgado comunicándole que ha sido denunciada por el Hospital Nuestra Señora de los Dolores por intrusismo laboral, por dar de comer a su madre y realizarle algunos cuidados y curas que no le competen.

“Desde la plataforma entendemos del todo punto desproporcionado que se denuncie en el juzgado a una hija que lo único que hace es cuidar de su madre, después de haber perdido a su padre en las circunstancias en las que lo perdió. En lugar de ver a los familiares como amigos, aliados, los ven como enemigos, y los denuncian. Algo debe estar muy mal cuando pasan estas cosas. Lo cierto es que ella, esta hija denunciada, está muy afectada y sobrepasada por todo lo que le está pasando.

“III.- Pero la cosa no quedó así, y en estos días hemos tenido acceso a nuevos casos con situaciones similares en centros de mayores gestionados por esta y otras empresas, o directamente por el IASS. Uno de ellos corresponde a otra señora ingresada en el mismo Centro Sociosanitario del Norte, en Icod, del que antes hablábamos. De nuevo sus familiares tienen que hacer frente a infecciones continuas de orina, a baños en seco, a tres pañales por día asignados a una señora con múltiples patologías a la que además “suministran laxantes a diario. De nuevo han de comprar y pagar por muchos conceptos, y de nuevo sus quejas y reclamaciones en el centro no llegan a ningún puerto.

“Y hablamos con más familias, algunas no dicen nada, por temor a represalias sobre sus mayores, una de ellas, sin llegar a denunciarlo públicamente, nos cuenta y muestra documentos en los que se quejan de un moratón con el que aparece su madre, en un centro privado y concertado bastante caro y con fama de lujoso de Tenerife. La solución que nos cuenta que toman en el centro es cambiar a la señora de planta y enviarla a otra con ancianos con problemas mentales, debiendo sufrir los gritos y las situaciones que se viven en esa planta. La familia busca la manera de sacar a su madre de ese centro, temiendo que pueda ocurrirle algo más grave.

“Y así vamos sabiendo cosas y más cosas, casi ninguna buena, y hasta nos topamos con dos trabajadoras de un centro sociosanitario de Santa Cruz que en su día se quejaron por las deficientes condiciones en las que las obligaban a trabajar, y al poco estaban las dos sin trabajo, como también es normal que personas empleadas que llevaban mucho tiempo sean despedidas o finiquitadas para contratar a personal más joven con carácter eventual, al que pagarán menos para ganar más. Y comprobamos lo rentable que es el negocio de los geriátricos para muchas empresas, quedando pendientes de hablar con más familias que parece que tienen cosas que contarnos.

“Finalmente, ayer miércoles 6 de julio, remitimos escrito al Cabildo de Tenerife pidiendo reunión urgente con el señor presidente y responsables de los demás grupos, para poner sobre la mesa la información que nos ha ido llegando y buscar la manera de mejorar este horror que parece, por lo que nos muestran, el trato a nuestros mayores en algunos centros de Tenerife”.