China exige investigar los crímenes de guerra de EEUU y la OTAN en Afganistán tras la retirada

Unos 47.000 civiles afganos murieron como resultado del conflicto armado en Afganistán en abril de 2020

EDDC.NET / Madrid

En 2010 WikiLeaks publicó los registros afganos en los que aparecían docenas de documentos de guerra clasificados, descargados en la red del Pentágono por el denunciante Chelsea Manning. Esos fueron los primeros hechos sólidos que demostraron que algunos ataques militares occidentales resultaron en víctimas civiles.

El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Wang Wenbin ha declarado que los responsables de los crímenes de guerra deben rendir cuentas de los casos de asesinatos masivos de civiles en Afganistán, presuntamente cometidos por Estados Unidos y otros países de la OTAN, durante los 20 años de guerra.

"Se deben salvaguardar las vidas y los derechos humanos del pueblo afgano. Se trata del Estado de derecho internacional, la justicia y el progreso de los derechos humanos", dijo el portavoz.

Según el Ministerio de Relaciones Exteriores de China, unos 47.000 civiles afganos murieron como resultado del conflicto armado en Afganistán en abril de 2020, cuando Estados Unidos y los talibanes (grupo terrorista proscrito en Rusia y otros países) firmaron el acuerdo de paz, que resultó en la retirada de la OTAN del país, que se completó el 30 de agosto de 2021.

Cuando WikiLeaks filtró en 2010 más de 91.000 documentos clasificados descargados de la red militar estadounidense sobre bajas civiles masivas en Afganistán como resultado de las acciones de las tropas de la OTAN, los documentos mostraron que los asesinatos de cientos de civiles no se mencionaron en los informes de Estados Unidos y la OTAN sobre sus acciones militares en el país, lo que provocó una ola de descontento público. Ninguno de los países rindió cuentas sobre la base de estas revelaciones.

Más recientemente, las redes afganas y estadounidenses informaron de otra debacle cometida por las tropas estadounidenses en medio de la caótica evacuación a través del aeropuerto internacional de Kabul. Tras el mortífero atentado de Daesh-K (proscrito en Rusia y otros países) en el aeropuerto, que se cobró la vida de unas 200 personas, incluidos soldados estadounidenses, Estados Unidos informó de haber realizado un ataque aéreo en Kabul contra un vehículo de Daesh-K . Sin embargo, CNN y una emisora ​​local dijeron que la explosión también mató a varios civiles, incluidos seis menores en la ciudad. El Pentágono se comprometió a investigar los informes y dijo que no estaba en condiciones de desacreditarlos en este momento.