¿Cómo pequeños cambios en casa pueden ayudarte a ahorrar en la factura de la luz?

El truco está en sumar pequeños gestos diarios que, juntos, se notan a final de mes

ELDIGITALDECANARIAS.NET/Tenerife

Hay una especie de mito instalado: que para ahorrar en la factura de la luz necesitas meter placas solares, cambiar todo el sistema eléctrico o comprar electrodomésticos de última generación. Pues no. Hay muchas acciones más simples (y baratas) que también funcionan. El truco está en sumar pequeños gestos diarios que, juntos, se notan a final de mes. Esto es lo que mucha gente descubre cuando empieza a seguir consejos prácticos, como los que comparten webs como luzilia.es, enfocadas en hacer más fácil entender cómo funciona el consumo eléctrico.

El enemigo invisible: los aparatos en stand by

Parece una tontería, pero no lo es. Todos esos aparatos que dejamos enchufados aunque no los estemos usando —televisor, microondas, cargadores, consolas— siguen chupando electricidad. Se llama consumo fantasma. Y representa entre un 7% y un 10% del total mensual. Solución: regletas con interruptor. Le das al botoncito antes de dormir y listo. No cambia tu vida, pero sí tu factura.

El frigorífico también tiene sus trucos

No necesitas cambiar tu nevera. Solo usarla mejor. Por ejemplo, no abrirla 30 veces en cinco minutos. Cada vez que lo haces, entra aire caliente y el motor tiene que currar el doble. Otro truco: mantener el congelador lleno. Sí, lleno. Si no tienes comida de sobra, puedes meter botellas de agua congeladas. El frío se conserva mejor y el aparato trabaja menos. Más eficiencia, menos gasto.

La iluminación tiene más margen del que parece

Pasarse a bombillas LED es solo el primer paso. Lo interesante viene después: aprovechar más la luz natural, usar tonos claros en cortinas y paredes para que la casa refleje más luz, y tener interruptores por zonas, no uno para toda la estancia. Ah, y olvídate de dejar luces encendidas “por si acaso”. Apaga, aunque sea solo por media hora.

Electrodomésticos que lavan, pero también consumen

Elige bien cuándo poner la lavadora o el lavavajillas. No solo por el horario (algo de lo que te informa bien luzilia.es), sino por la carga. No pongas la lavadora medio vacía. Espera a tener suficiente ropa y aprovecha los ciclos eco. El agua fría también limpia, y consume menos energía.

Cocinar sin que se dispare el contador

Si usas vitrocerámica, prueba esto: apaga los fuegos unos minutos antes de que la comida esté lista. El calor residual terminará el trabajo. También es buena idea tapar las ollas para evitar que el calor se escape y usar el microondas en lugar del horno cuando se pueda. Menos tiempo, menos gasto.

El aire acondicionado no tiene que estar todo el día

Un clásico del verano. Llegas a casa, pones el aire a tope y lo dejas ahí durante horas. Y luego te preguntas por qué la factura sube como la espuma. Usa el aire solo cuando lo necesites, ponlo a 24 grados (sí, se está bien a esa temperatura), y mantén ventanas y puertas cerradas mientras esté encendido. También ayuda ventilar a primera hora o por la noche, cuando el aire de fuera está más fresco.

La domótica no es solo para casas inteligentes

Hoy en día, hay enchufes inteligentes que se conectan al móvil y te dejan controlar cuándo se apaga cada cosa. Puedes programar la cafetera para que solo funcione por la mañana o cortar el router por la noche. Esto es muy útil si te cuesta acordarte de apagar aparatos o si pasas muchas horas fuera.

Si te lo propones, se puede sin complicarse

No hace falta volverse técnico ni obsesionarse con el contador. Si vas cambiando hábitos poco a poco y prestas atención a cómo usas los aparatos de siempre, vas a ahorrar en la factura de la luz sin darte cuenta. Y si además utilizas herramientas tan útiles como las que ofrece luzilia.es, el ahorro se multiplica. Porque no se trata de gastar menos un mes, sino de hacerlo siempre sin que te suponga un esfuerzo extra.