La asociación marroquí contacta con los recursos de acogida y el ministerio de Inclusión para acercar información básica sobre la celebración del Ramadán

Da comienzo el mes sagrado para la comunidad musulmana y desde nuestra entidad aportamos claves para que profesionales de la intervención social

EDDC.NET / Málaga

Hoy da comienzo el Ramadán, un mes sagrado para la comunidad musulmana porque coincide con el momento en el que Mahamed recibió su primera revelación del Corán. Por eso desde la Asociación Marroquí para la Integración de los Inmigrantes hemos elaborado el documento ‘Pautas para la gestión óptima del ayuno de Ramadán en los Recursos de Acogida’, en el que facilitamos la información necesaria y orientamos a las entidades de Andalucía que cuentan con este tipo de recursos en los que residen personas musulmanas.

Desde nuestra organización consideramos que la diversidad y la convivencia intercultural son aspectos que necesariamente debemos cuidar para facilitar la integración de todas las comunidades, la no discriminación y el respeto entre culturas. Por ello en este documento, que hemos hecho llegar al Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, así como a diferentes asociaciones, administraciones, recursos habitacionales, centros de protección de menores y centros penitenciarios, ofrecemos información básica que ayuda a entender las condiciones para permitir el ayuno en este mes de Ramadán.

De esta forma, profesionales de la intervención social podrán guiarse, adquirir conocimiento y algunas claves para proporcionar un servicio sensible, concienciado de la realidad diversa y que garantice el ejercicio de la libertad religiosa, siendo este un derecho fundamental universalmente reconocido. Entre otros aspectos, se acerca información sobre los horarios de las comidas, los tipos de alimentación que suele consumir la comunidad musulmana en este mes, los horarios y los espacios de rezo, que son las principales dificultades que se plantea sobre la gestión del Ramadán en los centros de acogida.

¿Qué y cuándo es Ramadán?

El Ramadán es un mes sagrado en el calendario musulmán, considerado un periodo de ayuno que dura 29 o 30 días, en función del año. En estos días las personas musulmanas, entre otras prácticas, deben abstenerse a la comida y bebida desde el alba hasta el ocaso, una franja horaria que varía cada día según la hora en la que amanece y anochece. Este año el Ramadán dará comienzo mañana, martes 13 de abril, y finalizará el 12 de mayo. Por tanto, se prevé que la fiesta del Eid al-Fitr se celebre el jueves 13 de mayo.

Cabe señalar que no todas las personas musulmanas están obligadas a hacer el ayuno. Como norma general, queda exenta cualquier persona que debido a su estado de salud no pueda realizarlo. Tampoco tienen que guardar el ayuno las mujeres embarazadas en estado avanzado de gestación, las mujeres con la menstruación, personas que estén de viaje, los niños pequeños o aquellas personas que realizan actividades físicas por su trabajo, además de quienes estén en tratamiento médico y necesiten tomar medicinas.

Una vez que se rompe el ayuno tiene lugar la comida del Fotúr, que suele ser la principal y por tanto debe ser completa y equilibrada tras varias horas sin comer. Por lo tanto, se recomienda que sea contundente e incluya alimentos con altas cantidades de calorías y proteínas, como huevos, dátiles, leche, frutas, harina, azúcar, verduras y carne. La última comida antes de que vuelva a comenzar el ayuno es el Sohúr, que se produce justo antes del alba, siendo muy importante y recomendada para que se pueda enfrentar el siguiente día con energía.

En los días normales, la mayoría de las personas musulmanas acuden a la mezquita por la noche para realizar de forma colectiva el último rezo del día, que tiene lugar una hora y media después del Fotúr. Este año, como consecuencia de la pandemia, se recomienda tener en cuenta el horario del toque de queda y el tiempo necesario para volver a casa, valorando así la idoneidad de acudir o no a la mezquita. Este rezo también puede practicarse en la residencia habitual, por lo que es recomendable que los recursos de acogida cuenten con espacios habilitados para los rezos en los que se cumpla la distancia de seguridad. Hay que tener en cuenta que es una obligación rezar sobre una alfombra o tela limpia, y a causa del coronavirus se recomienda que la alfombra no sea de uso colectivo, sino de uso individual.