Quintero: “La nueva desaladora de Granadilla es de gran importancia tanto para la población como para el desarrollo agrario”

El delegado del Gobierno aseguró que el diálogo siempre deriva en beneficio al pueblo

EDDC.NET / Santa Cruz de Tenerife

El consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del gobierno de Canarias, Narvay Quintero, ha destacado la importancia que la nueva desaladora de agua de mar Granadilla de Abona, entregada por el ejecutivo canario al Cabildo de Tenerife para su explotación, tiene para los agricultores del sur de la isla, ya que permitirá incrementar los recursos para uso agrícola en la zona de medianías y, en consecuencia, abaratar su coste, al reducir la presión que la población y el turismo ejercen sobre este bien limitado.

Durante la inauguración de esta instalación, Quintero indicó que además de esta planta, que ha supuesto una inversión de 29 millones de euros, su departamento prevé entregar próximamente otra desaladora en Tenerife, la situada en Guía de Isora, con un presupuesto de casi 16 millones de euros, y actualmente en fase de pruebas.

El consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas señaló la importancia del convenio de obras hidráulicas con el Estado que ahora concluye, y añadió que su departamento ya trabaja con los cabildos en la elaboración de un nuevo documento que sirva de base para la negociación de un nuevo convenio.

Para el presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, la infraestructura de Granadilla es de máxima importancia para el Sur de la Isla y “nos lleva a concluir que vamos por buen camino para solucionar el tema de saneamiento en Tenerife en el marco de lo previsto en el Plan Hidrológico que prevé una inversión de cerca de 256 millones de euros. Para ello ya hay proyectadas algunas infraestructuras”.

“En este sentido cabe resaltar también el esfuerzo presupuestario que se está realizando desde la corporación insular que en los presupuestos para el próximo año destina 20 M para el área de Aguas, de los que 16,7 son para infraestructuras hidráulicas, sin contar con las obras de saneamiento incluidas en el Plan de Cooperación Municipal. La depuradora del Valle de Güímar, y en otras estaciones en Fasnia y la Isla Baja, son otras de las actuaciones que queremos acometer y que permitirán además poner más cantidad de agua para los agricultores”, añadió.

Por su parte, el alcalde de Granadilla, José Domingo Regalado, destacó la importancia que tiene esta depuradora para Granadilla “como motor económico y social de una comarca que recibirá agua desalada de calidad, lo que permitirá realizar una menor presión en los acuíferos”.

El delegado del Gobierno en Canarias, Enrique Hernández Bento, quiso resaltar la importancia del diálogo y el consenso interadministrativo a la hora de planificar y ejecutar obras como la Edam de Granadilla.

Esta planta, que se diseñó para satisfacer la demanda de la comarca de Abona y cubrir el descenso de los recursos hídricos subterráneos, permitirá garantizar el suministro a la población y mejorar la calidad del agua que reciben los usuarios. Además de abastecer a unos 56.000 habitantes, incrementará los recursos para el riego, de ahí su importancia para la agricultura. Será gestionada por el Cabildo de Tenerife través del Consejo Insular de Aguas, en colaboración, inicialmente con los ayuntamientos de Arico y Granadilla y, en el futuro, de San Miguel, Arona y Fasnia.

Esta instalación, situada en una parcela de unos 18.000 metros cuadrados en el Polígono Industrial de Granadilla, parte de un proyecto básico inicial aportado por el Consejo Insular de Aguas de Tenerife y sus obras han sido contratadas y ejecutadas por la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del Gobierno de Canarias.

La construcción de la desaladora, el depósito de cabecera y la primera fase de la conducción de transporte -hasta Arico y San Isidro- han supuesto una inversión de 29 millones de euros, financiados con fondos Feder y del ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, en el marco del convenio en materia de aguas entre la Comunidad Autónoma y el Estado. A esta cifra hay que añadir unos ocho millones adicionales correspondientes a otras obras complementarias que está ejecutando el Cabildo de Tenerife.

Las obras que se han entregado incluyen la instalación desaladora conectada a la red eléctrica, la elevación de sus aguas hasta un gran depósito de 10.000 m3 a la cota 203 y la distribución de sus aguas hasta Arico y San Isidro. El Cabildo de Tenerife será el responsable de explotarla a través del Consejo Insular de Aguas, reforzando así el suministro de agua potable actual a la zona costera y de medianías, supramunicipal comprendida entre los núcleos poblacionales de San Isidro-Aeropuerto-Los Abrigos por el sur, y Tajao- La Jaca por el norte.

Esta infraestructura, que funciona durante las 24 horas del día, utiliza la tecnología de ósmosis inversa, que permite la producción de caudales de gran calidad, con capacidad para 14.000 m3/día. Los novedosos sistemas de recuperación de energía aumentan su eficiencia y reducen los costes de producción.

Ha sido construida con una estructura modular para facilitar su ampliación si fuera necesario, hasta los 42.000 m3/día, lo que permitiría el abastecimiento de unos 168.000 habitantes y haría posible que el suministro se extendiera a la zona costera y de medianías supramunicipal comprendida entre los núcleos poblacionales de Las Galletas por el sur, y El Porís- Las Eras por el norte.

La parcela donde se localiza también reúne las condiciones de ubicación idóneas para instalar equipos de energías renovables -fotovoltaica y eólica- que producirían en un futuro gran parte de la energía eléctrica consumida por la planta.

Se trata de la tercera gran desaladora de agua de mar de gestión pública que entra en funcionamiento en la isla de Tenerife, después de la de Adeje-Arona y la de Santa Cruz de Tenerife. La cuarta será la de Fonsalía, Guía de Isora, ya terminada y actualmente  en periodo de pruebas.

Esta importante infraestructura, fruto de la experiencia técnica en desalación que existe en el archipiélago, es una muestra de la fructífera colaboración y coordinación entre las administraciones públicas estatal, regional, insular y locales implicadas.

Obra principal y complementarias

El proceso de desalación incluye nueve pozos-sondeos para la captación de agua de mar bruta, de los que siete están equipados con bombas de 450 m3/h cada una, además de un pretratamiento con tres filtros de arena y tres filtros de cartucho, con su correspondiente dosificación de reactivos químicos. A ello se suma el  proceso de desalación propiamente dicho con dos líneas gemelas para 7.000 m3/día cada una, con un bastidor con 511 membranas, bomba de alta presión para 332 m3/h., bomba booster para 478 m3/h., siete recuperadores de energía (cámaras isobáricas) y el correspondiente equipamiento auxiliar para el lavado químico y desplazamiento del interior de las membranas.

Completan la instalación un emisario submarino de evacuación de salmuera hasta la batimétrica - 8,00, un depósito de agua producto de 7.000 m3 de capacidad del que aspiran dos bombas para elevar agua producida hasta un depósito de cabecera a la cota 203, dos bombas para elevar agua producida hasta un depósito para el Polígono Industrial de Granadilla a la cota 95, y otras dos bombas para elevar agua producida hasta un futuro depósito para Arico a la cota 115. El depósito de cabecera a la cota 203 tiene 10.000 m3 de capacidad, y la alimentación eléctrica a la planta desaladora se efectúa a través de dos transformadores de 4.000 KVA, uno de reserva, y otros dos de 1.600 KVA.

Las obras complementarias, comprenden la conducción desde la EDAM de Granadilla hacia el este de 300 mm de diámetro y 2.440 m. de longitud,  paralela a la autopista TF-1 y adosada a la conducción de transporte de aguas depuradas que proviene desde Santa Cruz de Tenerife, y se completa con la impulsión directa desde la EDAM por medio de una conducción de Φ 250 mm, hasta un nuevo depósito de 8.500 m3 que estará situado a la cota 115 metros en la orilla de la carretera de El Río.

Estas actuaciones también comprenden la conducción desde la EDAM de Granadilla hasta el oeste hasta conectar con el futuro depósito de San Isidro, en conducción telescópica de Φ 500 y 6.700 m. de longitud y Ø 400 mm. y 80 m. de longitud, también paralela a la autopista TF-1 y adosada a la conducción de transporte de aguas depuradas que proviene desde Santa Cruz de Tenerife.

Además de dichas conducciones de transporte, se incluyeron en las obras complementarias, una serie de acciones que complementan las obras principales, entre las que destacan el postratamiento del agua producto mediante lechos de calcita (tecnología canaria); canalizaciones con dos tubos de polietileno DN-200 mm entre TF-1 y depósito de cabecera (como reserva para futuros cables de comunicación); variadores de frecuencia para las bombas de alta presión, y una bomba de alta presión y bomba booster de reserva para los dos bastidores actuales.