Un paso al frente por mi ciudad

Eloy Santana Benítez (*)

Mi vida ha sido siempre la de dar un paso al frente. Valoro poco el estado de confort y creo firmemente en la necesidad de fijarse metas en la vida y cumplirlas. Así lo hice cuando abrí un negocio por cuenta propia, que mantuve durante más de una década y que me reportaba un trabajo fijo, bien remunerado y con el que disfrutaba. Hasta que, en el año 2015, di el salto a la política. Y lo hice porque fui muy crítico con las políticas que convirtieron Telde en una ciudad triste y que nos arrancaron de cuajo el orgullo de ser teldenses. Creí que si tenía la oportunidad de colaborar para remediar ese caos, lo haría. Por eso cerré mi empresa y tomé aquella decisión firme y meditada, que me ha permitido trabajar por mi ciudad.

Hoy en día, no me arrepiento ni un solo minuto de haber actuado así. Creí en el proyecto de recuperar la ciudad, después de mandatos funestos, en los que se ejecutaron políticas que supusieron un dique de contención al desarrollo Telde. Y en este mandato, he tenido la inmensa suerte de ser el responsable de Limpieza y de Obras Públicas de nuestra ciudad y hoy puedo decir que, a pesar de la herencia recibida de aquellos que ahora se presentan a las elecciones con las mismas o con otras siglas, se limpia más y mejor, se ha mejorado en la recogida selectiva de basura y trabajamos intensamente para que el Servicio de Limpieza sea el que Telde merece y que no debió perderse nunca.

En el año 2012 se produjo el punto de inflexión que condujo a nuestra ciudad al abandono de los servicios públicos esenciales y ahora, después de mucho esfuerzo, estamos a solo un año de eliminar la deuda y el plan de recortes, para dar la vuelta a la situación y recuperar plenamente esos servicios. Pero no podemos olvidar que el peligro acecha, porque aquellos que condujeron a Telde al caos quieren volver a tomar las riendas del Ayuntamiento.  En nuestra mano está impedírselo y evitar que la ciudad vuelva a ser pasto de la desidia y el desgobierno.

Porque, a pesar de que otros gobiernos han gestionado de espaldas a la ciudad, nosotros lo hemos hecho pensando únicamente en el bienestar de la ciudadanía. Por eso, hemos podido desarrollar obras de gran calado, que se han acometido atendiendo siempre a la demanda de lo único que nos ha importado a quienes hoy gobernamos Telde: las y los teldenses.

Los proyectos concluidos o en marcha son muchos y muy importantes para el municipio. Ahí están, entre otros, la piscina de La Barranquera o la nueva área polivalente de Narea que da cobijo temporal a los puesteros mientras se modernizan las instalaciones del Mercado Municipal. Y ahí están también los trabajos de asfaltado en más de 30 barrios de nuestra ciudad, en donde hemos invertido más de tres millones de euros.

En este punto, no puedo dejar de hacer una reflexión y asegurar que si bien la política reporta muchos momentos de frustración, también ofrece pequeños detalles que se convierten en grandes satisfacciones, como la que viví hace un año, cuando una vecina salió de su casa a darme un abrazo, porque le habíamos asfaltado su calle después de 30 años sin que nadie se hubiera ni preocupado ni ocupado de hacerlo.

Y así, solo de esa manera y con ese objetivo, queremos seguir trabajando, porque ahora es cuando viene lo mejor. Ya hemos arreglado la casa por dentro, ya la hemos apuntalado para que no vuelva a derrumbarse y ya toca decorarla. Llega el mandato de garantizar los servicios que tanto se merece la ciudadanía. Ese será nuestro gran reto en el próximo Gobierno. Esperamos que los ciudadanos y ciudadanas depositen de nuevo su confianza en nosotros y que Telde se consolide como la gran ciudad que fue y que nunca debió dejar de ser.

(*) Concejal de gobierno de Vías y Obras del Ayuntamiento de Telde. Miembro de la candidatura de Nueva Canarias al Ayuntamiento de Telde.