¿Hay alguna prueba sobre risco caído, es lo que dicen que fue?

Padre Baéz (*)

Si Risco Caído es lo que fue, es decir: un laboratorio, un centro científico, un lugar donde medir y contar el tiempo, un reloj astrológico, y mil tonterías más, ¿hay una sola prueba gráfica que lo demuestre?, porque que sepamos, los guanches, sabían medir, contar, escribir, representar  y más que raro, que no se vea en todo ello, ni una raya, ni un grabado o garabato, una marca, señal o algo que verifique y ratifique cuantas imbecilidades o/y tonterías están diciendo del mismo, que no es ya lo que dejaron los guanches allí, sino cuanto quieren ver sin existir los amigos de inventivas, de fantasías, de locuras, porque al fin y al cabo, sin prueba alguna, sin demostración alguna, sino por la simple –e inevitable (salvo se tape el dichoso agujero)- entrada de un rayo de sol y ello tan matemático y exacto, que no tuvo un desvío, ni un mínimo de desplazamiento en su confección, como que no, y ello porque cuanto dicen no se ve de dónde devenga o provenga, sino de una mente acalorada y no centrada, capaz de engañar, embaucar e idiotizar incluso a clases que por sus edades, profesiones, y aficiones debieran decir: pero, ¿esos son visiones, fantasías, elucubraciones o locuras dementes?

Porque, ¡vamos si hubiera una sola marca, raya, círculo, cuadrante, dibujo, etc.!, que apoye esas tesis absurdas y ridículas, que trasciende el globo terráqueo, para perderse en el de los planetas y astros, como que no, no hay referencia, ni documentación escrita -a sus modos y estilos- o gráfica de lo que estudiaban presuntamente el cielo, y marcaban, o señalaban comprobaciones, y demás.

Todo lo cual, a falta de lo que antecede, es para concluir, sin ir más lejos, que cuanto se ha vertido sobre esas cuevas del risco ese caído, no es sino locuras de un nuevo quijote, que ha encontrado a muchos sanchos panzas, que creen a su señor, cuantas visiones les daba la locura.

Que no es de recibo, se informe algo, sin apoyo o demostración de lo que se dice, sino ni siquiera como hipótesis, o futurible, algo imposible y de imposible demostración, salvo la imaginación de lo que dicen sin más, y cuanto se les haya ocurrido, y ello sin poder probar absolutamente nada, sino que la masa borreguil, dada a no razonar, sigue ciegamente cuantas bobadas y sandeces, les muestran los que con títulos, pero sin lógica, ni matemática, sin razonamiento y sin demostración o comprobación alguna, digo: ¡y ya está!, porque si fuera sugerir, suponer, tal vez, a lo mejor, quien sabe, etc., etc., como que sí, por humildad y verdad, pero caer en la soberbia de la mentira y sin tener fe, pontificar y cual si verdad revelada fuera, y digna de ser creída sin más, como que no.

Y no, porque no aguanta un asalto. Que no está bien afirmar sin más, cual si se hablara ex cátedra; que en ciencia y en arqueología todo está por demostrar, verificar, confrontar, etc., pues no se sabe nada, y si no, acúdase a cualquiera de los yacimientos, y de todos, todos los arqueólogos lo que dicen -lo poco o casi nada que dicen- o escriben, es que no se sabe, no sabemos (y curioso, que del risco caído ese se sabe todo y más y mucho más), sin embargo, de este pobre y hediondo -por haber sido siempre un cagadero- parece que se sabe todo, se afirma categóricamente todo, sin lugar a dudas, y nada dejan a la duda o a la demostración, sino que es así, y es eso, sin más, porque se lo han sacado de la manga, sin ton ni son (salvo el sonido de las monedas que entrarán si aceptan todas estas barrasadas). Y no, en Historia, sin documentación, no se puede dar ni un paso; o hay pruebas, o no hay Historia.

 A no ser la oral (tan válida o más que la otra, exista o se tenga que no es el caso, sino de todo lo contrario]), pero que en este caso, la oralidad más bien dice todo lo contrario -repito-: no se estudiaba el cielo, sino el suelo (ganadería y agricultura, son aquellas cuevas deficitarias, devenidas a retrete y estercolero, sin más), ¿de dónde se sacan las tonterías que afirman?, ¿por qué tan reticentes para decir nada o algo de todo lo demás, y de este se sabe todo y más, con certeza sin duda alguna?

Extraño comportamiento de políticos que usan y manipulan a arqueólogos que muertos de hambre -por no producir, arriesgar y editar o publicar) venden sus saberes y ciencias por el plato de sus mesas; que a ese precio, un servidor ante se moría de hambre, antes que tergiversar e inventar la historia falsa de lo que no fue Historia verdadera.

Y ya debieran pronunciarse otros a este fin, que si no lo hacen es porque deficitarios de un sueldo, callan y otorgan por no contradecir la voz del amo, y viven con el sí guana, de quien se doblega y traiciona lo que debieran defender. Porque sabe uno, y por sigilo no debo, ni puedo descubrir, son muchos los que a boca chica, y del gremio y del área, me felicitan y dicen que un servidor tiene toda la razón, pero que ellos tienen que seguir la voz de sus amos, dado que tienen familias y bocas que mantener, y si hablan se van al paro y al hambre y por eso tragan, pero que se sepa que a este juego, están sometidos o presionados. No son hombres libres, y es tendencioso, manipulador, y buscador de dinero lo que les mueve a los de arriba, que obligan a decir lo contrario de lo que es respecto a ese chollo inventado de una cueva sin más mérito que otras tantas miles y miles (no digo cientos y cientos), que pululan con iguales características y con la mejora de que no están en riscos caídos, sino en riscos que se mantienen en pie, y no fueron cagaderos o retretes, después estercoleros y lugar de basuras, con pajeros y pesebres.

Ya les dije en el primer escrito sobre este tema, que por prudencia, uno calla o silencia la pelea a muerte de dos arqueólogos, que se retan en hallazgos e importancias para derribar uno al otro, con estas y otras inventivas provocando reacciones viscerales, que de una parte se las cobra de esta manera, y de la otra espera el tiempo pase para reírse de la negativa a ser declarado oro, lo que es barro.

Todo lo que se esconde o hay en la trastienda de esto, es el orgullo, la soberbia, las ganas de triunfo y mérito fácil, en base a engaños de y para bobos, porque es que no admite una discusión seria, debate, discusión, etc., sino exposiciones fantasmas, que corren y que como la mancha de aceite va creciendo ante el silencio de los que callan, unos por lo dicho, y otros porque quien ríe después se ríe más (o algo parecido que dice el refrán).

Pena y dolor da, saber y ver a la clase universitaria callada, doctores entregados, licenciados doblegados, y así una sociedad de mal saber emborregada, entregada, cómplice de mentiras y de engaños, rompiendo métodos científicos, sin investigación seria y cierta sino diciendo tonterías e inexactitudes, propias de cuentos para niños, pero cuentos de los malos por inventivas y absurdos interesados. Bajo, muy bajo caería la unesco, si traga y cae en la trampa, si se deja embaucar y ven lo que no existe, sino que con vacía verborrea, sin demostración o prueba alguna, afirman en base a nada lo que no existe, ni existió. De ahí que intenten echar balones fuera extendiendo la cosa de la cueva a toda la geografía de la isla y meten en el mismo saco -de paso- todos los yacimientos -vengan o no a cuento-, pero en masa, todos juntos, sin más precisión, cotejo, semejanza o parecido (porque haberla las hay: cuevas con cúpula o bóveda igual, y hasta mejores, y hasta con el agujero, con finalidades bien diferentes -sé de uno que mira justo a un importante yacimiento de renombre, y desde donde había señas, contacto, control o visionado, para comunicados o simple observación). Y conste, que no tengo nada en contra nadie, ni contra nada; solo estoy de parte de la verdad, y que solo sale uno en defensa de la verdad Histórica. La Historia no se la puede inventar, porque entonces sería un cuento, y este cuento del risco caído, lo es y malo; lo sorpresivo es, que personas sesudas y mayores, traguen con este cuento, sin atreverse a alzar sus voces en defensa de la verdad, que es la única que nos debiera hacer mover, y vivir.

El Padre Báez, que descubre las mentiras que desde aquí, se envían a la UNESCO, al pueblo y a la masa en general, sin que nadie diga esta boca es mía, con tal de no contradecir a los que buscan dinero a costa de inventivas.  Que afirmar gratuitamente, no está bien, ni se debe: es bulo, mentira, pura fantasía e imaginación (u otros intereses y motivos, pero faltando a la verdad).

(*) Articulista