La Asociación Unificada de Guardias Civiles de Santa Cruz de Tenerife reitera la necesidad de aplicar políticas de conciliación de la vida familiar y laboral
Esta demanda fue planteada en el transcurso de la última asamblea general anual
EDDC.NET / Santa Cruz de Tenerife
La conciliación de la vida familiar y laboral fue uno de los asuntos tratados por la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) de Santa Cruz de Tenerife en su reciente Asamblea General Anual y Electoral, celebrada el pasado día 10, que contó con la presencia del secretario nacional y portavoz de AUGC, Juan Fernández, y el secretario nacional Finanzas, Juan Antonio García Momblona. En dicha asamblea, además, los asistentes votaron favorablemente a la única candidatura de Junta Directiva presentada para coordinar la delegación tinerfeña, que seguirá estando liderada por Francisco Javier Merideño Maestre, quien asumirá de nuevo la responsabilidad de secretario general.
La asamblea abordó, entre otros temas, las dificultades que afronta la mujer que desarrolla su profesión en la Guardia Civil, para compaginar su actividad laboral con la esfera personal de su vida. Las mujeres guardias civiles representan en España un 6 por ciento de un colectivo total de 79.000 hombres, el más bajo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y de las Fuerzas Armadas. Asimismo, en la provincia de Santa Cruz de Tenerife el tanto por ciento es similar a la cifra nacional. Así, en la Asociación Unificada de Guardias Civiles, de un total de 747 afiliados, 55 son mujeres, lo que representa un 7 por ciento del total de dicha afiliación.
La necesidad de encontrar fórmulas que faciliten la conciliación de la vida familiar y laboral de las mujeres guardias civiles constituye una vieja reivindicación de la AUGC en general, y en particular de la delegación de Santa Cruz de Tenerife. En este contexto, esta asociación, decana de las asociaciones profesionales y la mayoritaria en el Consejo de la Guardia Civil, ha subrayado que la ausencia de medidas en este sentido provoca un alto grado de absentismo laboral entre las integrantes del Cuerpo. Así, AUGC denuncia la ausencia de salas de lactancia, problemas en reducciones de jornada para atender el cuidado de hijos/as, la aplicación de políticas de integración de la mujer en un entorno masculinizado, ausencia de prendas para mujeres en periodo de gestación o la falta de adaptación ergonómica en prendas como chalecos antibalas.
Con más de 30.000 afiliados, AUGC cuenta con representación en todo el territorio español, en cada una de las unidades y especialidades del Cuerpo y viene liderando el movimiento asociativo desde la llegada de la democracia, cuando nació como un sindicato clandestino. Su lucha por la democratización y la desmilitarización de la institución le valió en 2010 el Premio Nacional de Derechos Humanos que concede la Asociación Pro Derechos Humanos de España (apdhe).
