Pablo Iglesias utiliza móviles encriptados para dificultar que la UDEF destape la financiación ‘ilegal’ de Podemos

La CIA está detrás de la pista de su supuesto financiador iraní

www.mil21.es / Madrid

Pablo iglesias se comunica mediante móviles que encriptan sus conversaciones telefónicas con el fin de dificultar que la UDEF y el servicio secreto destapen la trama iraní que financia a Podemos, según información a la que ha tenido acceso mil21.

También la CIA investiga los movimientos del mentor iraní de Iglesias, el empresario Mahmoud Alizadeh Azimi. El líder de Podemos teme que las investigaciones concluyan con su procesamiento.

Pablo Iglesias ha cobrado desde 2013 hasta poco antes de las elecciones generales de diciembre pasado 93.000 euros por presentar el programa de televisión ‘Fort Apache’, producido por 360 Global Media SL, la productora del canal iraní en español Hispan TV. En su huida hacia adelante, el líder de Podemos justifica que ha recibido fuertes sumas del régimen de los ayatolás con el argumento de que muchas empresas hacen negocios con Irán y que no había que despreciar esta fuente de ingresos.

Pero no sólo la UDEF y el servicio secreto español van tras la pista del dinero recibido por Podemos, también la CIA investiga los movimientos del mentor iraní de Iglesias, el empresario Mahmoud Alizadeh Azimi (administrador único de la productora 360 Global Media), que recibe transferencias desde sociedades instrumentales de medio mundo. Alizadeh viaja continuamente a Qatar, Dubái y Estambul, desde donde vuela a Teherán; un ‘modus operandi’ que ha llamado la atención de la inteligencia norteamericana.

Extremar la seguridad

A raíz de la comprometedora financiación del régimen de los ayatolás, organizada con el apoyo del servicio de inteligencia iraní, Iglesias recibió instrucciones para que extremase las medidas de seguridad en sus comunicaciones telefónicas y utilizase móviles encriptados.

Iglesias y la cúpula de confianza de Podemos utilizan móviles equipados con sistemas de encriptación de las conversaciones. En concreto, el modelo ‘Blackphone’. Como parlamentario dispone de un ‘Iphone 6’ facilitado por el Congreso de los Diputados, así como un tercer terminal ‘Iphone 5S’ con la pegatina de Syriza para sus llamadas personales.

Los móviles que se reciben de las instituciones en función del cargo pueden están preparados para ser interceptados por los servicios policiales y de inteligencia. Así ocurrió en Catalunya cuando altos cargos de la Generalitat recibieron móviles de regalo que estaban manipulados por el servicio secreto catalán, (Cesicat) que espiaba sus comunicaciones.

El informe PISA estrecha el cerco

Las prisas de Pablo Iglesias por hacerse con la vicepresidencia del gobierno, en un ejecutivo de coalición con el PSOE, tenía como objetivo último frenar las investigaciones en curso sobre su persona y la financiación de Podemos. Desde Vicepresidencia obtenía el control del CNI y de la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos de Inteligencia a la que reportan los servicios de Policía y Guardia Civil.

El cerco sobre la financiación de Podemos se estrecha tras haber remitido la UDEF al Tribunal de Cuentas el informe PISA (Pablo Iglesias Sociedad Anónima) en el que hasta el momento han aflorado 2,4 millones de euros pagados por Irán a Podemos entre 2012 y 2015.

El informe policial señala que el objetivo principal de quienes financian a Podemos es dificultar el origen de los fondos. Normalmente el dinero se mueve desde Teherán a empresas instrumentales con sede en Beirut (Líbano), Kuala Lumpur (Malasia), Khorug (Tayikistán) o Belice, pero estas empresas lo reciben en cuentas abiertas en Hong Kong, Moscú, Londres y Dubai, antes de llegar a 360 Global Media en España. Un largo camino para que se pierda el rastro y que la UDEF ha logrado desenmarañar.

En algunas ocasiones han salido remesas de fondos desde bancos rusos, como es el caso del ‘Commercial Bank Chemeximbank’ de Moscú con destino a 360 Global Media. La cuenta pertenece a una sociedad instrumental denominada ‘Shokhona Limited’ con sede en Khorug (Tayikistán).