Los empleados del Ayuntamiento de Tacoronte piden un cambio en las políticas del personal y la destitución de Castillo Gil como concejal de Recursos Humanos.

Anuncian movilizaciones y dar a conocer a la ciudadanía esta situación

EDDC.NET / Santa Cruz de Tenerife

El pasado 10 de mayo se convocó una asamblea general de empleados públicos del Ayuntamiento de Tacoronte a iniciativa de todos los sindicatos (CCOO, CSIF e IC) con representación en el comité de empresa y en los delegados del personal. Tras el debate de la situación actual del marco de relaciones laborales en esta Administración  se aprobó el manifiesto donde se motiva la necesidad de un cambio en la política de recursos humanos y la destitución al frente de la concejalía de Recursos Humanos de Domingo Castillo Gil. Asimismo se aprobó e inicio de una campaña movilizadora y de dar a conocer a la ciudadanía esta situación.

Estas demandas se sustentan en la situación de incompatibilidad y de conflicto de intereses ya que antes de su nombramiento como concejal del área, participó en diferentes procesos como abogado del Ayuntamiento en temas que luego está gestionando como concejal de Recursos Humanos. Por su demostrada incapacidad para alcanzar acuerdos colectivos. Se encuentra paralizada la negociación del acuerdo colectivo de funcionarios y del convenio colectivo del personal laboral.

Por la arbitrariedad en la toma de decisiones  produciendo movilidades y   cambios sustanciales de forma forzosa. Por el constante menosprecio a las iniciativas y a los órganos paritarios. Se mantiene un talante de falta de respeto hacia los representantes electos de los empleados públicos, tratando de desprestigiarlos como único mecanismo de defensa ante las denuncias a sus actuaciones. Por la mala fe negociadora, tratando de imponer una Relación de Puestos de Trabajos sin consensuar los objetivos de tal procedimiento, sin tener como horizonte alcanzar la estabilidad de los puestos de trabajo, sin poder participar en su redacción, sin tener acceso a la documentación que se facilitaba a una empresa externa para su realización. Y por los incumplimientos de las sentencias favorables  a los trabajadores.

Esta situación está provocando la desorganización y el desmantelamiento de los servicios públicos municipales: falta de previsión y planificación consensuada, acumulación de funciones por un lado y vacío de contenidos en otros puestos de forma arbitraria.

Todo esto sirve de pretexto para acudir con mayor frecuencia a la externalización/privatización de servicios públicos. Como consecuencia, el deterioro en la calidad de los mismos. Queremos poner freno a las “malas prácticas”. El actual concejal está contaminado de las mismas.  La situación que se ha creado solo nos conduce a la tensión social, a la constante judicialización de las relaciones laborales y al conflicto permanente.

Para darle la vuelta a esta situación, se necesita que el alcalde de un giro a su política de personal y tenga un compromiso firme y claro de cambiar esta situación, y para ello solicitamos  la sustitución del concejal de recursos humanos y abrir una nueva etapa con un nuevo responsable de recursos humanos que tenga otro talante y la voluntad sincera de sentarse a dialogar para alcanzar acuerdos que supongan la creación de un mejor ambiente de relaciones laborales y sociales. Para desde ahí continuar defendiendo y mejorando la calidad del servicio público que se presta a la ciudadanía.