Sí se puede señala el “electoralismo del PSOE y la complacencia de CC” como responsables del fracaso de la piscina municipal de Candelaria

Califica la situación como resultado de “una forma de hacer política de baja calidad”

EDDC.NET / Santa Cruz de Tenerife

Sí se puede señala el “electoralismo del PSOE y la complacencia de CC” como responsables continuados del fracaso de la piscina cubierta municipal de Candelaria, paralizada tras la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC), que ha decretado que no se ajusta a la legalidad el proyecto presentado por la Unión Temporal de Empresas (UTE) Centro Deportivo Candelaria.

La portavoz del grupo de Sí se puede en el Ayuntamiento, Mayca Coello, califica la situación como resultado de “una forma de hacer política de baja calidad, habitual pero absolutamente reprobable, tan característica de los gobiernos del PSOE y del PSOE-CC en los dos primeros años del presente mandato, en Candelaria”. Coello asegura que la organización ecosocialista “actuará en consecuencia” tras el análisis de la sentencia, ya que, de manera reiterada, cada vez que el expediente de la piscina se ha tratado en el pleno municipal, Sí se puede ha exigido que se estudiaran bien los asuntos, que se elaboraran adecuadamente los documentos y que se cumpliera la legalidad, atendiendo también a las consideraciones del Secretario Municipal en sus informes.

Al parecer, la consecuencia inmediata de la decisión del TSJC es iniciar de nuevo la licitación de la obra y prohibir a la UTE que se vuelva a postular como candidata a desarrollar un nuevo proyecto, pero “Sí se puede exigirá garantías de que esta situación no va a tener consecuencias económicas ni de ninguna índole para el Ayuntamiento y, por tanto, para la ciudadanía de Candelaria”, precisa.

“Sí se puede intentó siempre que el proyecto de la piscina se gestionara bien, pero, desgraciadamente, eso no era lo importante para el grupo de gobierno de PSOE-CC responsable de esta calamidad. Para ellos, no se trataba tanto de priorizar una infraestructura básica para la ciudadanía y para un proyecto de ciudad, sino que lo fundamental era la foto y la valla con información falsa en un intento patético de rascar votos”, sentencia Coello.

La decisión del TSJC supone “un duro golpe para un proyecto que fue el mascarón de proa del programa electoral del PSOE en 2015”, subraya la portavoz de Sí se puede. El proyecto ha sido cuestionado en primer lugar por la denuncia presentada por la empresa Syocsa Inarsa, que denunció la concesión de la obra a la UTE, porque en su plan los metros cuadrados de superficie comercial superaban a los dedicados al uso deportivo de la instalación.

El proyecto también fue denunciado por el Colegio de Arquitectos, mientras que el secretario municipal se vio obligado a pedir orientación al Consejo Consultivo de Canarias y a distintas estancias de ámbito estatal.

La construcción y explotación de la piscina cubierta de Candelaria fue adjudicada a la UTE Centro Deportivo Candelaria por un proyecto que contemplaba varios niveles, que incluían aparcamientos y gran superficie comercial, alejándose abismalmente de la superficie orientativa de 90 metros cuadrados, para esta finalidad, que establecía el Pliego de la licitación. Este aspecto es el que ha causado la parálisis del proyecto, al sentirse agraviada una de las empresas licitadoras que cumplió con lo establecido en ese documento contractual.

Desgraciadamente, la piscina cubierta de Candelaria ha sido un fracaso continuado y un engaño reiterado a la ciudadanía, y como tal, también debe suponer la exigencia y la asunción de las responsabilidades políticas que corresponden.