Teodoro Sosa desmantela la Policía Local de Gáldar con consecuencias palpables en la seguridad del municipio

CCOO y UGT cuestionan la gestión del alcalde en materia de seguridad

EDDC.NET / Las Palmas de Gran Canaria

Desde UGT y CCOO en la Policía Local de Gáldar ponemos en conocimiento de la opinión pública que el alcalde de Gáldar de Nueva Canarias prácticamente ha conseguido su propósito, dejar sin efectivos policiales a la Ciudad de Gáldar, con resultado nefasto para el municipio.

Por un lado, existe una acuciante falta de seguridad laboral y un continuo desmembramiento del cuerpo policial en detrimento claro de la Seguridad Ciudadana. Después se llena la boca diciendo que ha sacado dos plazas de policía (cuyo proceso de selección no ha finalizado a día de hoy), y también alegará que ha publicado otras cuatro más pero ni siquiera ha comenzado el procedimiento de exámenes para estas plazas. Todo ello, teniendo en cuenta que Gáldar llegó a tener unos 52 agentes de Policía y en la actualidad trabajan 27 efectivos.

La ratio que establece el gobierno de Canarias, según la población del municipio de Gáldar, debe de ser de 58 agentes. ¡Casi el doble de lo que existe en este momento!. Además, en cuestión de uno o dos meses, entre cuatro y seis policías causarán baja por jubilación, lo que dejará la plantilla bajo mínimos. 

Desde los sindicatos mayoritarios CCOO y UGT, desconocemos la razón de tal desmantelamiento, máxime cuando llevamos años pidiendo el incremento de efectivos, muy necesarios no sólo por los ratios ya indicados por el gobierno de Canarias sino por garantizar los servicios que permitan atender todas las incidencias que estamos recibiendo.

Al parecer Teodoro desconoce que no se puede hacer lo mismo con 58 que con 27. Como dice el refranero popular, ‘no se puede estar en misa y repicando’. Es decir, que con la escasez de agentes no se cubren todos los actos, ni se llega a todos los barrios. Originando diferencias del todo deplorables entre ciudadanos de primera y de segunda categoría, según donde vivan a pesar de pagar sus impuestos dentro del mismo municipio.

No es de extrañar que cada vez más en la prensa reflejen noticias relativas a las sensaciones de inseguridad ciudadana.

Por otro lado, ha generado mal ambiente laboral debido a las malas condiciones de trabajo. En el Ayuntamiento no se respetan los acuerdos mínimos de los funcionarios, ni siquiera los que rigen para el personal funcionario estatal que sirven de base mínima. Éste mal ambiente ha propiciado que varios agentes, dado que aquí no se les valora, hayan opositado para otros Ayuntamientos con lo que sigue la disminución de efectivos.

Ya la fama de malas condiciones laborales en Gáldar es tal que pese a la creación de una plaza en Comisión de Servicios para entrar en la Policía Local de Gáldar, el concurso ha quedado desierto, nadie ha querido venir.