IUC denuncia la persecución machista del Ayuntamiento a sus trabajadoras

Ramón Trujillo, concejal de Izquierda Unida Canaria (IUC) en Santa Cruz de Tenerife, denuncia que el Ayuntamiento ha normalizado una persecución machista a sus trabajadoras que supone que, cada año, al menos una veintena deba devolver horas no trabajadas por tener que llevar al centro de salud a sus hijos menores cuando enferman. El concejal de IUC señala que, en estos casos, recurrir a los tribunales por la vulneración de los derechos laborales es algo que no compensa porque, aunque se obtenga una sentencia favorable, los gastos legales son muy superiores a la pérdida salarial ocasionada por la ausencia. El mensaje que reciben las trabajadoras es que, aunque ganen en los tribunales, perderán dinero y, además, nada impedirá al Ayuntamiento volver a cometer los mismos atropellos. Trujillo cita el caso de una trabajadora a la que no se concedió permiso para faltar un día para cuidar a un hijo enfermo de menos de dos años. La trabajadora acreditó su asistencia al centro de salud, la prescripción médica de necesidad de “cuidados maternales” y, aún así, se le negó el derecho a faltar al trabajo un único día en el marco del “deber inexcusable” amparado por la ley. La trabajadora recurrió a la Justicia y obtuvo sentencia favorable. No obstante, el Ayuntamiento, en su vergonzosa lucha contra los derechos de sus trabajadoras, recurrió la sentencia y se encontró con que el Tribunal Superior de Justicia de Canarias no admitió el recurso de apelación y, asimismo, condenó al Ayuntamiento a pagar 200 euros de costas. Obviamente, se trata de una cuantía con la que la trabajadora no recuperó los gastos ocasionados por la vulneración de sus derechos. También el año pasado se dictó otra sentencia contra el Ayuntamiento por denegar autorización a otra trabajadora para llevar al medico a un hijo menor de edad. El portavoz municipal de IUC señala otro ejemplo de “techo de cristal blindado” contra las trabajadoras municipales. Se trata del caso de una trabajadora que, por motivos de salud, solicitó un permiso sin retribución por “asuntos propios” y le fue denegado por “necesidades del servicio”. Sin embargo, pocos días después, le fue concedido el permiso al ser solicitado como excedencia. La diferencia es que, en el segundo caso, cuando vuelva a su puesto de trabajo, perderá la promoción laboral que había obtenido con anterioridad. Ramón Trujillo llevará al próximo pleno municipal una pregunta sobre este asunto y, asimismo, pedirá a la Inspección de Trabajo que investigue la discriminación de género sistemática que se produce en el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife.