El Cabildo de Gran Canaria destina parte del antiguo internado de San Antonio a sede de la Fundación Internacional Alfredo Kraus

El inmueble requiere de una rehabilitación integral para adaptarlo a sus nuevos usos

EDDC.NET / Las Palmas de Gran Canaria

El Cabildo de Gran Canaria destinará el edificio del antiguo internado insular de San Antonio, en el barrio de Vegueta de la capital grancanaria, a sede de la Fundación Internacional Alfredo Kraus para albergar así tanto un museo, como un centro  de formación e investigación que preserve el legado del célebre tenor y difunda el arte lírico.

El espacio, ubicado en la calle Sor Brígida Castelló, junto a la iglesia y plaza de Santo Domingo, será objeto de un proyecto de restauración para cumplir con los objetivo de la Fundación de dar alojamiento y permitir la adecuada preservación de los fondos del legado del tenor Alfredo Kraus, así como la oferta de proyectos culturales y musicales que atraerán a amantes y nuevos adeptos al arte lírico de todo el mundo atraídos por la figura de Kraus.

“Hemos escogido un edificio que se encuentra en el corazón de Vegueta”, exclamó el presidente del Cabildo, Antonio Morales, quien recordó que se trata del barrio en el que nació Alfredo Kraus y que está situado en la Plaza de Santo Domingo, conectada con simples paseos a pie con importantes centros culturales como el Museo Canario, el CAAM, la Casa de Colón, San Martín, Museo Arte Sacro, Fundación Mapfre, Teatro Pérez Galdós, Fundación Juan Negrín y Asociación Los Gofiones, entre otros.

Como curiosidad, citó el presidente, ya en algunos documentos se habla del itinerario Kraus: la Casa de Colón, donde nació, el Teatro Pérez Galdós, donde tantas exitosas veladas disfrutó el público con su arte y el Cementerio de las Palmas donde se encuentra su mausoleo. Además, está a unos minutos de la parada preferente del Teatro y de la Estación de Guaguas de San Telmo.

El presidente, que presentó las nuevas dependencias junto a la presidenta de la entidad, Rosa Kraus, y los consejeros de Hacienda y Presidencia, Pedro Justo Brito, y de Cultura, Carlos Ruiz, explicó que inmueble reúne distintas edificaciones que actualmente acogen un variado programa cultural y asistencial que depende del Cabildo de Gran Canaria.

Se trata de un conjunto con una superficie construida de 1.494 m2, de los que 833 m2 están en la planta baja y 661 m2 en la planta superior. La superficie útil total es de 1.283 m2. Además cuenta con una azotea de 633 m2.

El Cabildo cuenta ya con un informe técnico de viabilidad que garantiza la adecuación del espacio para acoger las necesidades de la sede, que contempla un área de recepción, salas expositivas, espacio multiusos, archivo, biblioteca, área administrativa y tienda, entre otras dependencias.

Pensada como un espacio cultural abierto, confluirán tanto aquellas personas especializadas en el arte lírico como aquellas que no lo son -estudiantes, turistas, público en general-, con el fin de ofrecer una visión dinámica y moderna de la trayectoria de Alfredo Kraus, permitiendo así una apertura a sus inquietudes que los incite a profundizar en el tema, apuntó la hija del tenor, quien no ocultó su satisfacción por los avances en la materialización de los objetivos encaminados a preservar y difundir el legado del querido tenor grancanario.

Partituras con sus inscripciones, valioso fondo personal y de aprendizaje

El fondo existente abarca fotografías, libretos, carteles de ópera y conciertos y programas de sala, ediciones impresas y artículos de prensa, grabaciones y videos, galardones y condecoraciones y otros objetos, que serán expuestos ya sea en modo permanente como a través de exposiciones temáticas temporales.

Especial valor tiene el vestuario que usó en los escenarios de todo el mundo, el piano en el que ensayaba en Lanzarote o las partituras con sus inscripciones a mano, valioso no solo desde el punto de vista personal y emotivo, sino como material de aprendizaje, pues los estudiantes pueden observar en las partitura sus adaptaciones para sacarles mayor grandiosidad en sus actuaciones.

En este aspecto, se considera estratégico el valor del turismo cultural que visita la isla, no solo en su aspecto social y humano, sino como generador de riqueza económica y empleo local. Corresponderá también a esta área la programación de eventos culturales abiertos de todo tipo y la organización de una tienda con objetos relacionados con la trayectoria artística del tenor y su labor como embajador cultural de la isla de Gran Canaria.

Además del espacio museística, la Fundación Alfredo Kraus espera poder acoger una escuela de canto y una residencia de estudiantes que permita desarrollar hasta el máximo su principio fundacional de la difusión del género lírico a través de la formación, la educación, la investigación y divulgación de dicho género.

Constituida el 13 de marzo de 1996 por iniciativa del propio tenor y su familia, uno de los objetivos que se prioriza sus estatutos es facilitar la preparación y formación de profesionales y el perfeccionamiento de cantantes líricos, en virtud de un programa permanente de enseñanza de alto nivel, así como el desarrollo de iniciativas de carácter nacional e internacional que contribuyan a la vigorización y creación de nuevas obras dentro del género lírico.

En el marco de ese objetivo de formación figura el Concurso Internacional de Canto Alfredo Kraus, que fue recuperado de la mano del Cabildo en 2017 y que volverá a celebrarse en 2019 en su séptima edición.

Historia del inmueble

Las escasas referencias históricas existentes apuntan a que tuvo como precedente el Hospital de San Lázaro. Entre 1937 y 1941, el Cabildo impulsó la construcción de dos internados: el internado de Los Ángeles, para niñas, y el internado de San Antonio, para niños. Ambos internados fueron fundados por sor Brígida Castelló, de la congregación de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paul, y se construyeron en terrenos de la terrateniente de la época, Pino Apolinario Placeres.

El Plan de Protección de Vegueta-Triana señala dos piezas y recoge la autoría de Laureano Arroyo de la fachada que da a la calle sor Brígida Castelló, fechándose entre 1905 y 1910.